La vivencia sexual implica un sin numero de procesos personales de los que a veces no somos consientes, el entendimiento del sexo, la sexualidad y la erótica como grandes pilares de este abordaje podría dar paso al reconocimiento de ellos, pero hay muchas cosas más por la que preocuparse para garantizar una vivencia adecuada. Una de las cuestiones más importantes sin duda es la salud sexual.
La salud sexual es definida por la OMS como un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Este requiere de un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia.
Todo lo que acompañe la vivencia sexual debe garantizar que el estado de bienestar físico, mental y social se mantenga o mejore. ¿Has notado que existen cosas que desequilibran ese estado de bienestar?, si la respuesta es si, posiblemente existen factores que deterioran tu estado de salud en lo sexual.
Si quieres mejorar la forma en la que vives tu entorno sexual, podrías empezar por garantizar que tu estado de bienestar mejore o se mantenga optimo en cada una de las siguientes áreas: física, mental y social.
Vamos a continuación darte una línea de recomendaciones que podrían potenciar un estado de salud sexual mejor del que experimentas actualmente.
Bienestar físico:
Este apartado responde básicamente a cómo se encuentra tu salud física en relación con lo sexual. ¿Te alimentas adecuadamente, tomas la suficiente agua?, ¿Has hecho revisiones con tu ginecóloga o con tu medico en el ultimo año?, ¿Haces con la frecuencia suficiente los exámenes para garantizar que no tienes algún tipo de ITS? o ¿Te ejercitas? Vale la pena charlar con el profesional pertinente en caso de que al autoevaluarte determines que hay cosas que podrías verificar o cambiar para garantizar un estado de salud físico bueno.
Bienestar mental:
¿Cómo es tu experiencia psicológica frente a la vivencia sexual? ¿Vives miedos, vergüenzas o culpas cuando te relacionas sexualmente con otros o contigo mismo?, ¿Sufres de algún tipo de disfunción sexual a causa de la ansiedad que te genera el interactuar sexualmente con otros? Es pertinente hacer una autoevaluación de nuestros procesos psicológicos ante la vivencia sexual, pues esta garantiza o niega la posibilidad de disfrutarnos en nuestros cuerpos plenamente.
Bienestar social:
¿Te sientes cómodo viviendo tu sexualidad en sociedad?, ¿Sientes que te juzgan?, ¿No puedes ser tu por miedo a que puedan violentarte?, ¿Tu entorno para relacionarte sexualmente es seguro?, ¿La comunidad en la que vives te garantiza información sobre estos temas y te permite tener acceso a ayudas o asesoramiento? Si hay alguno de estos aspectos que no se te esté garantizando puede que tu salud sexual no esté en las mejores condiciones.
La vivencia sexual merece de un estado de salud que necesita ser cuidado y garantizado, puede que ante la falencia de alguna de estas condiciones la forma en la que quieres vivir tu sexualidad no se esté dando.
Lincy Acosta - Sexologa